Lulú Petite

Queridas amigas y amigos Siempre es un placer regresar a este espacio para saludarte y escribirte. Vivimos el final de un año que jamás olvidaremos. Seguramente los libros de historia, para las generaciones futuras, darán testimonio del año que vivimos en pandemia. Del año en el que, como humanidad, hicimos frente a uno de nuestros retos más grandes, vencer a un enemigo tan diminuto como peligroso. Hoy, es tiempo de honrar a quienes han trabajado en el frente de batalla contra ese enemigo. Desde luego, a los profesionales de la salud, que día y noche atienden en la primera línea a los enfermos; pero también a todos quienes han hecho que el mundo siga funcionando. Al sector financiero, al económico, al productivo, al de servicios. A las y los médicos, enfermeras, auxiliares, terapeutas, farmacéuticos que nos cuidan a diario, a científicos e investigadores, que han trabajado en vacunas y tratamientos eficaces, pero también a quienes trabajan en tiendas, a maestras y maestros, a quienes producen alimentos, a quienes atienden en los bancos; a todas y todos quienes hacen que el mundo siga girando. Sin duda el impacto de la pandemia en muchas cosas será un efecto que deberemos enfrentar con toda responsabilidad. La pandemia está evidenciando brechas, deja claro que, aunque todos tenemos los mismos derechos, no todos tenemos acceso a los mismos recursos. Amigas y amigos: Deseo, de todo corazón, que estas fechas decembrinas sean para ustedes motivo de alegría y celebración. Estamos en estos momentos, a nivel mundial, enfrentando uno de los momentos más críticos de la pandemia. Por un lado; ya existe la certeza de una vacuna que poco a poco llegará a todos. Por el otro, la temporada invernal incrementa los contagios de enfermedades respiratorias y el CIVID 19 no es la excepción. Por eso es tan importante que reforcemos medidas. Que evitemos la tentación de fiestas y los espacios con mucha gente. El heroísmo de los profesionales de la salud, en el frente de batalla, debe ser correspondido con nuestra responsabilidad de evitar contagios. Sin embargo, eso no nos puede quitar el derecho a la alegría, que vive en nuestros corazones, ni a la celebración que se puede realizar a distancia, con cuidado, sin poner en riesgo innecesario a nuestros seres queridos. Disfruten de estos días, gocen del amor que sienten y del que reciben, mantengan comunicación con sus seres queridos, siéntanse y háganse sentir amados, acompañados, comprendidos. Es un año diferente, pero nosotros somos los mismos. Mujeres y hombres valientes, trabajadores, solidarios, echados para adelante y con la certeza de que lo que viene, siempre será mejor. Muy feliz navidad y los mejores deseos para que 2021 sea un año de retos cumplidos, éxito, prosperidad y mucha salud.