Lulú Petite

Lo prometido es deuda. La primera rifa se desarrolló formalmente del 2 de enero al 15 de febrero de 2011. Ya se reportó el chavo con el número ganador y estamos organizando agenda porque resulta que tiene su jornada de trabajo apretada y no puede cualquier día ni a cualquier hora. No importa, soy muy formal con mis promesas así que de que me lo poncho, me lo poncho, ya veremos cuándo.

El caso es que cumplí y, como quedamos, hoy adelanto datos para el siguiente juego:

Primero, qué hay que mejorar las reglas con respecto el anterior, se aceptan sugerencias, pero de entrada, para la segunda cita gratis, se me ocurre que en vez de pura rifa, sea más onda concurso. Ahí van algunas ideas:

1) Que quien gane sea alguien que realmente quiere y puede aprovechar su premio, para que no lo revenda como si estuviéramos afuera del Azteca en juego de la selección con el Chicharito en la delantera (sin albur). Lo importante de una rifa gratis, es que no haya que pagar ¿No?

2) Que no se limite a los primeros 10 mil, sino a todos los seguidores de twitter, todos los que le hayan dado o le den follow a mi cuenta.

3) Que los criterios de selección de segundos y demás lugares no sean alfabéticos (bahhh).

4) Que no sea sólo uno el ganador, cantado por los chavitos de la lotería, sino que encontremos el modo para que hacia la fecha de la rifa, sean varios los que por méritoscompitan por la cita, pero que varios tengan algún tipo de premio. Algo así como un rally, hacer preguntas, juntar votos, conseguir retuits, followfriday o favs. No sé, algo se nos ocurrirá.

5) La fecha para la próxima rifa será para las vacaciones de verano, onda ya con el bronceador listo, así que hay tiempo para planear las bases con cuidado y se aceptan sugerencias. Mientras, hay que seguir mi cuenta en twitter, porque eso sí, para la cita gratis, ser follower sigue siendo requisito para participar.

La neta, una de las cosas que quedaron claras con la primer rifa, es que aunque de los 10 mil números sorteados a wilbur uno iba a ser el elegido, la competencia era tanta que la posibilidad de cada uno era pequeñísima. Casi como sentarse en el pajar y clavarse la aguja en la nalga.

Pero... ¿Qué tal si en vez de 10,000 competidores, fueran 100? Así las probabilidades crecen cañón y hay mucho más chance de ganar, si te interesa, entra a la RIFA VIP. Da clic en la imágen de abajo y entérate...